Al finalizar el estado de alarma provocado por el COVID19, Don Carlos Osoro, Arzobispo de Madrid, tras discernimiento con la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal, ha dispuesto el restablecimiento del precepto dominical para todos los fieles. En caso de causa grave no obliga el precepto pero se recomienda a las personas que estén en estas circunstancias que dediquen un tiempo a la oración personal o en familia.
Durante los días de verano, no dejemos de dar gracias a Dios por el don de la vida, sintiéndonos una comunidad de fe, alimentada por la Palabra y la presencia de Jesús en su Cuerpo y Sangre entregado por amor. Allá donde estemos o vayamos, celebremos el domingo, día del Señor.